Solitarias playas del Delta del Ebro
El Delta del Ebro es indiscutiblemente un lugar que vale la pena en verano. Especialmente, porque sus largas playas solitarias.
La playa del Fangar es un paraje virgen en medio de espacios naturales: 400 hectáreas de arena fina, aguas poco profundas, dunas y una apariencia como de desierto que se mete como una flecha en el Mediterráneo, rodeada de agua por ambos lados y visitada también por aves migratorias Solo naturaleza en estado puro.
En la playa de la Marquesa (de más de 4,5 quilómetros de longitud), sí que hay un chiringuito, y allí se practica el nudismo. Vaya tranquilidad. La de Riumar está frente a una urbanización, tiene bandera azul y todo tipo de servicios. Junto a ella, puedes observar flamencos en islotes de las cercanas lagunas.
Estas son las maravillas que te esperan en el Delta del Ebro. Y la aventura de bajar en kayak el Ebro o con un crucero. Y especialmente, la buena comida de la zona, a base de anguilas, ancas de rana y arroces. Tienes que probarla.
Para descansar, el moderno hotel HCC Montsià 2 estrellas de Amposta, con aire acondicionado, wifi gratis, TV de pantalla plana vía satélite, desayuno buffet y cocina local de temporada. Te ofrece sus habitaciones insonorizadas y luminosas con alojamiento gratuito para 1 menor de 2 años y 1 menor de 10. Y contrarrestar la naturaleza salvaje del Delta con la vida cultural y social de Amposta.
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